Trata de manera natural tus lesiones
Como ya vimos en el artículo anterior de botiquín natural para las heridas en la escalada, es esencial que como deportistas prioricemos el cuidado de nuestro cuerpo. Es un DEBER que así como cuidamos de la naturaleza y nuestro entorno también nos informemos en temas de salud y hacernos responsables de nuestra integridad física.
A continuación la especialista en Salud Integrativa con un diplomado de terapia floral y acupunturista, Nicole Martinic, nos deja algunas recomendaciones de qué productos naturales utilizar esta vez para las diferentes LESIONES corporales que nos puede dejar la escalada.
En primer lugar la experta, propone como algo primordial la prevención. Para esto no entrega algunos tips previos a nuestras salidas a terreno:
- Conectarnos con la práctica o disciplina que estamos realizando. Debemos ser conscientes del “estado de presencia” o “aquí y ahora” para así poder sacar el mayor provecho posible del momento.
- Es imprescindible conocernos y aceptarnos, saber cuáles son nuestros límites y hasta dónde podemos llegar, sobre todo si estamos esforzando nuestro cuerpo. Así no terminaremos con lesiones por exigirnos más de la cuenta.
- Utilizar los implementos necesarios para cada ocasión. Si vamos a escalar contar con los artículos de seguridad adecuados y la vestimenta correcta, puede evitar que dañemos nuestro cuerpo.
Lesiones Musculares
Para este tipo de lesiones es muy importante saber identificar los síntomas y tratarlos en orden de prioridad. Muchos de ellos pueden agravarse o hacerse crónicos por lo que además de los tratamientos naturales que te ayudarán a desinflamar y calmar el dolor, se debe consultar a un traumatólogo o especialista en el área.
Esguince
Tratamiento: Con respecto a los esguinces o torceduras, la regla es simple. Durante las primeras horas (12-24) de la lesión se aplica frío para disminuir la circulación sanguínea y así evitar que se inflame, o se siga inflamando. Además el frío alivia el dolor por la acción anestésica de éste en general. Es importante que el hielo no esté en contacto directo con la piel porque produce más daño. Después de eso, se busca el calor para aumentar la circulación y así la sanación de la lesión.
Como suplemento antiinflamatorio se recomienda el aceite de linaza ya que es una semilla con alto contenido de omega 3, lo que te ayuda a desinflamar la lesión. Se debe ingerir entre 1.500 y 2000 mg de unidades de aceite al día.
Se puede complementar con crema de árnica o con compresas de manzanilla, miel, caléndula, aloe vera, entre muchas otras para el uso externo. Con éstas se puede hacer también una infusión y sumergir la lesión.
Tendinitis y bursitis:
Tratamiento: este tipo de lesión es similar -aunque no igual- a las torceduras y esguinces. Por lo tanto, los primeros tratamientos van a ser los mismos. Es importante inmovilizar si es que fuese necesario (mucho dolor al moverlo por ejemplo) para no seguir sobrecargando los tendones, ligamentos y/o articulaciones afectadas.
Como remedio es recomendable hervir a fuego lento durante media hora corteza de sauce. Éste contiene salicina, principio de la aspirina. Tomar dos o tres veces al día y te ayudará a desinflamar.
Se puede complementar con infusiones relajantes y antiinflamatorias de uso externo como la lavanda, melisa, manzanilla, o caléndula. Es necesario atender a un profesional para recibir los tratamientos adecuados.
Contracturas y desgarros:
Prevención: Es muy importante hacerle caso al cuerpo cuando habla. Generalmente las contracturas o desgarros han avisado su llegada varios esfuerzos antes y cuando llegan ya es porque nos lo merecemos. Aunque sabemos que son muchas las ganas de escalar, si está resentido mejor parar y tomarse unos días de descanso.
Tratamiento: En la contractura buscamos relajar, como en todas las lesiones, vamos a aplicar frio para detener la irrigación y evitar mayores daños y luego calor para aliviar y propiciar la relajación del músculo para que sane.
Así también la crema de árnica será muy útil. Debemos hacernos masajes suaves, siguiendo la veta del músculo o circulares, según sea más cómodo. Para los desgarros se necesitan mayores cuidados posteriores, y si no son bien tratados, te van a recordar siempre que están ahí.