En todas partes hay Pochocos
Por Elvis Acevedo.
Recuerdo cuando tiempo atrás le recomendé a una amiga, que andaba buscando destino “cerrístico” para el verano, que fuera a Patagonia, a la zona de Chaltén donde hay trekkings hermosos y buenos cerros para subir. El diálogo fue más menos así:
– Amiga: Quiero hacer algo pal verano, alguna cumbre tranqui en un lugar bonito…
– Yo: ¡Anda a Chaltén! Hermoso lugar, buena onda, cerros, trekkings, ¡es ideal!
– Amiga: ¿Me estay we…?
– Yo: ¿Por qué?
– Amiga: Para ir allá hay que ser seco po, onda saber escalar, usar cuerdas y todo eso, yo no sé escalar, ¿para qué me molestai?…plaff!!!
Tiempo después me encontré con otro compañero que no veía hace un buen tiempo, me comentó que tenía algunos días en época invernal y me pidió que le recomendara algún destino en Chile o afuera, como Perú o Bolivia. El diálogo fue más menos así:
– Amigo: Bueeeeena peeeeeeerro!!
– Yo: ¡Qué pasa perro!
– Amigo: Oye weón, tengo días pa hacer algo en invierno, ¿algún dato bonito de cerro?
– Yo: Compa, vaya a Huayhuash, Perú, hermoso, menos concurrido que la Cordillera Blanca o la Real en Bolivia, ¡un lugar idílico!
– Amigo: ¿En serio? Espérame voy a “googlearlo”.
– Yo: ¿A qué?
– Amigo: A “googlearlo” …..aquí esta…
– Yo: aaaah, claro, “googlear”…
– Amigo: Yiaaaa, pero pa que!!
– Yo: Pa que… ¿qué?
– Amigo: soy pesao weón, yo no soy escalador, no tengo tanta experiencia, hago cerros más sencillos, pa que tan pesao gil &/E&%/%&$???, toma!!!! Plafff!!!!
Y me di cuenta que, o algo hacía mal al momento de dar consejos, o algo pasaba al momento de buscar información de montañas, que las personas piensan que hay sectores donde solo van los más experimentados ultrasecospowerfullextreme polacoseslovenoschecosrusos…
Haciendo ejercicio
Hice el ejercicio de intentar buscar información de montañas que pudiera subir en Patagonia (Zona Chaltén) y Huayhuash (Perú), no trekkings, porque para trekkear ambas zonas tienen algunos de los más hermosos recorridos que existen en el mundo y hay mucha y buena información sobre ellos. Sino pensar en viajar a subir cerros y conocer dos sectores realmente increíbles, no tan lejos ni tan caros, desde el punto de vista de alguien con experiencia media. Con esto también busqué intentar averiguar por qué a veces la gente se desanima antes de tiempo, asumiéndose sobrepasados por las dificultades de las montañas de un determinado sector.
El resultado fue bastante claro, cuando busqué información de Patagonia la gran mayoría de los blogs y páginas, e incluso videos en Youtube y Vimeo, hablan de las espectaculares escaladas en las hermosas pero difíciles agujas del sector, las andanzas de Colin Haley en la Mermoz (uno de los mejores escaladores del mundo), la travesía integral de Guillaumet a De la S` por Honnold y Cadwell (otros de los mejores escaladores del mundo), las peripecias del Rolo Garibotti en el Fitz Roy y mucho más, pero casi todo en ese tono de dificultad. Bastante extrema para alguien de experiencia media.
Hice lo propio con la Cordillera Huayhuash, en Perú, la mayoría de la información dedicada al Yerupaja, la segunda montaña más alta de Perú y cuya ruta más fácil debe ser un ED+…o al Siula Grande, que además es mundialmente famoso por la formidable sacada de cresta de Joe Simpson, la que retrató de manera bastante entretenida en el libro “Tocando el Vacío”. Siendo muy rebuscado, como en la página 40 del listado “glooglero”, aparece el Jirishanca, y es cuando uno dice… ¡pero pa qué!
Entonces claro, si soy un montañista con ganas, pero experiencia promedio, llámese cerros tipo Leonera, Plomo, quizá San José a lo mucho, pensar en ir allá a subir cerros con la información general que hay, es como decía mi abuelita: “tirado de las mechas”…
El que busca encuentra
Pero lo cierto es que hay opciones, hasta en las zonas con las montañas más difíciles del mundo, siempre hay opciones que abarcan todo el rango de dificultades y que nos pueden regalar algunas de las experiencias más maravillosas que se puedan tener; como ver el Cerro Torre enrojecido por las luces del amanecer o el Jirishanca y Yerupaja igual de rojos, pero al atardecer.
Por ejemplo, en Patagonia, en la zona del Fitz Roy también hay montañas como el Madsen que solo requiere manejarse un poco en trepes básicos, algo así como la pasada de rocas del Cerro La Cruz o el Cerro Eléctrico, que requiere algo más de experiencia en nieve pero en ningún caso es una dificultad extrema (una subida al Glaciar Iver sería experiencia suficiente); o el Cerro Polo, que es básicamente como el Pochoco de la zona, el Vespigani, Punta Velluda, y un largo etcétera. No todo son agujas verticales ni paredes glaciadas con seracs colgantes sobre la testa.
Estas opciones más sencillas, aptas para un rango mucho más amplio de montañeros, nos ofrecen vistas increíbles, de esas que te dejan con la boca abierta, son mucho menos exigentes tanto en lo físico como en lo mental, se pueden subir incluso en días de mal clima en que otras montañas de la zona son imposibles de intentar y permiten vivir la experiencia de una cumbre patagónica, con viento, frío y todo su agregado climáticozonaldelfindelmundo…
En resumen, con solo subir el Pochoco ya podría viajar a Patagonia a subir por ejemplo, El Polo…(No tengo idea porque se llama así…)
Hu…guuu….wuay….Huayhuash…
La gran mayoría de los viajeros chilensis que van a Perú, van a la Cordillera Blanca. Abundante información, descripciones claras, cerros fáciles y difíciles, pero bien documentados, etcétera. Claro que son zonas donde pensar en encontrar poca gente es como ir al Plomo con ganas de estar solo en la montaña…
Sin embargo, la Cordillera Huayhuash, que es solo una de las alternativas a la Cordillera Blanca (además están Vilcanota, Apolobamba, Ampato, Volcánica, Yauyos…) también tiene montañas que están al alcance de la gran mayoría de los montañeros, esos que como mis compañeros y yo que somos “amateur”, que solo salimos algunos fines de semana, que trabajamos de lunes a viernes y que bebemos alcohol en cantidades que según la OMS vendrían a ser perjudiciales para la salud. Esto, a pesar de que Internet y la escasa literatura de la zona nos muestren solo montañas brutales, repletas de seracs colgantes, donde las avalanchas están a la orden del día y donde hay que escalar más apretado que tornillo de submarino…
Los cerros Jurau, los Pochocos de la zona, con vistas alucinantes al Yerupaja y Rascac; el Diablo Mudo, más glaciado, siempre sencillo; el México, ideal para quienes tienen muslos petroleros buenos para los acarreos; el Minapatá, algo así como el Provincia; y la lista sigue y sigue.
Se puede ir a Huayhuash sin tener que saltar una grieta o escalar bajo un maldito serac inestable, de hecho podrían ir sin siquiera llevar una cuerda o arnés y matar varios pájaros de un tiro, como disfrutar de una de las cordilleras más formidables del planeta y, de paso, salir de los ultra-recorridos (no por eso menos hermosos) circuitos y cerros de la Cordillera Blanca…por ejemplo.
Invitación
La invitación esta vez no es a explorar, abrir rutas o buscar primeros ascensos. Es mucho más sencilla, es a salir de la zona de confort (no el del baño), atreverse a visitar lugares que parecen vedados para nosotros, los montañeros de fin de semana, los que no somos atletas de alguna marca, los que entrenamos pocazo, en resumen, los flojos, a no desanimarse si la información existente tiende a hacernos creer que en esos remotos lugares no hay espacio para nuestro estilo o experiencia. Siempre lo hay, pero hay que trabajar para encontrarlo y cuanto más arduo es el trabajo, la recompensa siempre es mayor.