Y ¿Quién protege los sectores de escalada de los escaladores?
Por Javiera Romero
Debido a que este verano el Parque Nacional Torres del Paine incrementó sus visitas en comparación al año pasado, es que a partir del 15 de febrero, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) comenzará a restringir el acceso a los circuitos más visitados por los turistas como medida para fomentar el turismo responsable ¿Qué pasa con el cuidado a las zonas de escalada?
En diciembre de 2015 ingresaron a los circuitos del Parque Nacional cerca 32.500 personas, un 7,8% más que en diciembre de 2014. En enero se registraron 47.290 visitantes, un 15,3% más que en el mismo mes del año anterior (según datos otorgados por la CONAF). Para mitigar estos efectos que pueden ser devastadores para la flora y fauna de este sector del planeta, es que la CONAF en conjunto de las instituciones turísticas de la zona, han decidido limitar el ingreso a no más de 80 personas por día al circuito Macizo Paine (también conocido como O), tramo comprendido entre los campamentos Coirón y Paso.
De esta forma, caemos en una interrogante no menor. Cierto es que las Torres del Paine es uno de los parques nacionales más visitados por los turistas, pero ¿Qué pasa con las zonas de escalada más visitadas en Chile? ¿Quién las protege? La basura es un problema. El exceso de visitantes, escaladores y no escaladores, en zonas como Cochamó también lo es.
Nadie ama los paisajes de escalada y las experiencias que nos ofrecen más que nosotros. O díganme ustedes, ¿Quién más que nosotros podría valorar tanto nuestra buen spot de Las Chilcas que a tantos nos vio crecer? Claro, además de los ermitaños que lo han habitado, somos nosotros y las instituciones que nos respaldan, la FEACh y Club Alemán Andino (DAV), quienes pudimos dar cara cuando se iniciaron los trabajos en este espacio. Sin embargo, con dolor vimos pasar varios momentos de tensión al verlo amenazado. Así también estos días, con la zona del Arrayán. Nuestro más preciado Bosque Mágico.
Pero ¿Quién protege a las zonas de escalada de nosotros mismos, los escaladores?
Cochamó, por ejemplo, recibió el año pasado más de 8.000 visitantes. Sin embargo, no es necesario contabilizar mucho para darnos cuenta que ciertos sectores de montaña pueden colapsar en esta época del año. Es así como quedan bastante dañados por el abuso de sectores que se les otorga la clasificación de “baños públicos”.
Generalmente y cada cierto tiempo, grupos de escaladores tanto como clubes de escalada, suelen organizarse en cruzadas por desarrollar y preservar los sectores con los cuales más se familiarizan. Los llamados «locales» son los que asumen el llamado y levantan campañas espontaneas con el afán de sumar fuerza a sus causas.
Así como la asistencia de la organización Acceso Sur quienes ya han organizado 3 jornadas de limpieza en Las Chilcas y el primer Roc trip en Cochamó.
Así es como el trabajo que Rocanbolt ha realizado a lo largo de diversas zonas del país, en conjunto a escaladores locales y otras organizaciones, ha consolidado sectores como Petorca o el Valle de los Condores, este último lleno de potencial y con 310 vías equipadas al día de hoy, con distintas dificultades y para todos los gustos.
En la zona central y específicamente en el Cajón del Maipo, lo realizado por Chileclimbers, no solo en términos de compilar y actualizar los topos de las zonas, sino abrir y desarrollar otras de manera constante y sistemática, ha permitido generar estacionalidades en varias zonas que antes, frente a la escasez de alternativas, no tenían descanso durante el año y su degradación era acelerada.
Este mismo trabajo también ha sido desarrollado de manera silenciosa por muchos otros escaladores en otros sectores de Chile. Equipando rutas y abriendo nuevos sectores de búlder o tradicional, su labor nos hace disfrutar día a día, permitiendo, a su vez, ampliar el universo de opciones y acceso a este hermoso deporte.
Sin embargo, esta misma apertura de los espacios resulta un arma de doble filo, pues por cada nuevo sector nace, también viene una batahola de nuevas problemáticas: la basura, los problemas de acceso por terrenos privados, los megaproyectos, el hacinamiento, etc etc etc. Y así nuevamente, un grupo de motivados se organiza y da cara.
Cómo es en otros lugares del mundo:
En España la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) posee un Comité de Acceso a la Naturaleza (The FEDME Nature Access Committee), conformado por los miembros de las federaciones de montañismo regionales que se ocupan de cuestiones de la naturaleza. Lo llaman el «perro guardián de la montaña», ya que es el que se encarga de, por ejemplo, trabajar y cooperar las actividades de montaña con los responsables de las áreas naturales protegidas. A su vez, buscan acuerdos específicos para la provisión de equipos y servicios para facilitar la práctica de deportes de montaña, como refugios de montaña, senderos o escuelas de escalada. Generan un refuerzo en materias de educación ambiental relacionados con la comunidad y también fortalecen las vías de cooperación con las organizaciones sociales en todos los aspectos relacionados con la compatibilidad de montañismo y la conservación de las zonas de montaña.
En Estados Unidos existe una organización encargada de cuidar estos espacios: Access Fund. Esta se conformó en el año 1991, debido a una serie de dificultades de acceso a las zonas de escalada que tuvieron origen en el transcurso de la década del 80, conflicto al cual le llamaron “la guerra de los pernos”.
Con el tiempo, su misión se ha diversificado y hoy en día es una organización que se preocupa de impulsar programas e iniciativas que permitan proteger las zonas de escalada del país Yanqui, a través de diferentes enfoques que van más allá del acceso.
Existen distintas aristas, y una de ellas es la de Política de escalada y defensa, la cual está enfocada en temas de legislación y acuerdos con parques nacionales y otros organismos gubernamentales del Medio Ambiente. Así también poseen un estamento de Administración y conservación, este nace debido a la inquietud de que el hacinamiento en las zonas de escalada trae innegables consecuencias para los paisajes naturales, es por ello que Access Fund se encarga de trabajar con las comunidades locales para desarrollar planes de administración a largo plazo, que aseguren el turismo sostenible. Otro de los estamentos más importantes es el de Educación, el que en conjunto de Black Diamond, pusieron en marcha el “Rock Project” un trabajo que busca inspirar a la comunidad de escaladores para el cuidado del medio ambiente y sensibilizar en torno a la práctica responsable al aire libre.
En Chile, si bien la motivación de los más comprometidos con el tema está, indudablemente no poseemos ningún organismo formal netamente enfocado a cuidar los sectores de escalada que pueda trabajar de la mano con CONAF o, incluso, el Ministerio del Medio Ambiente. Necesitamos planes de conservación que aseguren la integridad de las áreas naturales. Una de las formas para comenzar, es que los mismos estudiantes se preocupen de este tema y enfoquen sus tesis de grado en temas de conservación. Otra es la que todos esperamos, la conformación de una Federación de Escalada.
Con este escenario, lo que nos queda por el momento es confiar en las generaciones futuras y trabajar en conjunto por la conciencia de los escaladores, pues de la mano de la enseñanza del “aprete” debemos educar en torno al respeto al entorno que ha inspirado esta práctica.
Acá algunos consejos!