Acceso y protección de los Glaciares en Chile
El pasado 5 de diciembre el ministerio de Bienes Nacionales lanzó la campaña “Acceso a Lo Nuestro: Patrimonio de Todas y Todos”, una iniciativa que busca que las personas puedan acceder a los bienes de uso público.
Playas, ríos, cascadas, desembocaduras, lagos y glaciares son considerados bienes de uso público y el ministro de Bienes Nacionales, Víctor Osorio, hizo un llamado a denunciar a las personas que priven el acceso a estos lugares. Que los glaciares estén en este grupo podría ser un guiño del Gobierno hacia iniciativas como la de Greenpeace que pide la “Ley Glaciar 5 Estrellas” para implementar una regulación a estas reservas de agua dulce, sin embargo este proyecto lleva 8 meses estancado por culpa del Ejecutivo.
“Si son bien nacional de uso público y son lo nuestro, por qué el Gobierno permite el récord de destrucción de glaciares que tiene Chile”, dijo Matías Asun director de Greenpeace Chile a Revista Escalando, “Los glaciares están en tierra de nadie”, agrega.
El programa de la Presidenta Bachelet está en línea con la propuesta de Greenpeace. El texto señala: “La Nueva Constitución debe reconocer el dominio público pleno, absoluto, exclusivo, inalienable e imprescriptible de los recursos hídricos, mineros y del espectro radioeléctrico. El Estado tiene derecho a regalías por el aprovechamiento de los recursos naturales, especialmente minerales (…) Se declara las aguas como bienes nacionales de uso público, cualquiera sea el estado en que se encuentren, el lugar en que estén depositadas o el curso que sigan, incluidos los glaciares”. Sin embargo es en el Gobierno donde la iniciativa ha estado detenida por casi un año.
El proyecto de la ley “5 Estrellas” está en la Comisión del Medio Ambiente de la Cámara de Diputados donde recibió indicaciones sobre las cuales el Gobierno no se ha pronunciado. “Durante estos últimos 8 meses la división andina de Codelco, que es la que más glaciares ha destruido en la historia, sigue avanzando para obtener permisos ambientales y Barrick Gold se apronta a iniciar de nuevo operaciones. En términos prácticos estos ocho meses han servido para que los principales destructores de glaciares en Chile recobren fuerza, recuperen el aliento y continúen en lo que saben hacer que es destruir glaciares”, acusa Asun.
La tensa relación del Gobierno y los empresarios por las reformas que está promoviendo el Ejecutivo pueden ser una de las razones por las que el proyecto de ley está detenido. El ministro de Energía, Máximo Pacheco, ya hizo un gesto hacia los empresarios al apoyar el proyecto Alto Maipo, una hidroeléctrica no solo criticada por su impacto ambiental, sino que también podría afectar al glaciar del Morado, por debajo del cual se van a realizar obras y va a pasar el agua de los afluentes del río Maipo en tubos.
“Dada la cantidad de concesiones mineras y dado que no existe suficiente supervisión con respecto al acceso a las montañas, Chile limita en realidad no con Argentina, sino que con las concesiones mineras”, dijo el director de Greenpeace. Según Asun, en Chile las mineras no están respetando el libre paso a los glaciares. Esto debería empezar a cambiar con la campaña del ministerio de Bienes Nacionales, sin embargo, tanto la campaña como Asun hacen un llamado a la fiscalización ciudadana. Para el director de Greenpeace, una forma de combatir esta privación del acceso es con organizaciones ciudadanas que monitoreen a las grandes empresas y que además hagan las denuncias en caso de que vean trasgresiones a los permisos ambientales, un claro ejemplo de esto sería el trabajo que está realizando la Coordinadora de Ríos del Maipo, con el proyecto Alto Maipo. “Esto es fundamental porque el libre acceso es un derecho en el territorio nacional y no tener acceso a este patrimonio es sin lugar a dudas otra forma de abuso sutil, dado que no hay cobertura suficiente para monitorear que los derechos se cumplan en este país”.
Revista Escalando indagó sobre cómo que se considere a los glaciares bienes de uso público podría abrir una nueva arista en el Proyecto Alto Maipo
En el caso específico de Alto Maipo ¿se estaría afectando algún glaciar?
En principio el túnel que entuba el río hacia la zona de la central de pasada supone una perforación 300 metros debajo de un campo glaciar, el Morado. Las vibraciones propias del túnel y de la operación minera podrían afectar no solo el glaciar, sino que mucho más probablemente el permadfrost gravitante en la conservación del área.
En una segunda línea, las operaciones mismas de Alto Maipo en la zona también lo pueden afectar. Los glaciares aportan humedad al aire y aportan temperatura, un efecto que es mucho más que la acumulación hídrica, por lo cual un daño al glaciar se produce de manera directa sobre el hielo y de manera indirecta sobre las condiciones que ayudan a conservar el hielo. La intensidad de las operaciones constructivas también deterioran el ecosistema completo en el que los glaciares existen; esto supone una afectación indirecta, más difusa y más difícil de medir, pero no por ello menor, causada por las operaciones de la empresa. Desde este punto de vista hay denuncias que se van a hacer pronto y de las cuales se están recopilando los antecedentes para evaluar cuánta incidencia está teniendo y cuántos incumplimientos hay. Lamentablemente hay más falencias ante el sentido común que ante la normativa ambiental, justamente por lo pasiva que es.
El en caso de que se apruebe la iniciativa en el Congreso ¿se podría frenar el proyecto Alto Maipo?
Sin lugar a dudas, el objetivo de la ley “Glaciar 5 Estrellas”, como hemos llamado el proyecto que se discute, es triple: el primero es el reconocimiento de todos los glaciares como bien nacional de uso público y como responsabilidad del Estado. Sin importar su tamaño, todos deben estar protegidos, es decir se vuelven intocables. En segundo lugar todas las concesiones mineras que esperan operar en zonas donde hay glaciares deben diseñar sus proyectos de tal manera de no afectarlos y tercero, los proyectos que hoy los están afectando, como por ejemplo los de Anglo American, Baric Gold o Codelco, deben someterse a una auditoría para modificarlos y hacer de una vez por todas una minería que no dañe el Medio Ambiente.